Por Bosco Palacios:
Corazón, corazón… por ahí le intentó llevar Mariló Montero a
Anne Igartiburu durante la entrevista de este lunes. Pero no hubo manera… La
vasca, que se olió el embrollo en la primera pregunta, contestó firme, segura y
seca. Una Igartiburu regia, casi borde.
Y Mariló, a sus
anchas por su casa, empezó a tirar de la manta, de las sábanas internas de la
cama que Anne ha ido haciendo en TVE. Así le dijo a Anne que “cómo ella no iba
a saber cosas del programa que ella misma había diseñado a su gusto”.
Pero Anne no respondía más que con monosílabos. “¿Qué es la
cultura para Carmen Lomana?”, seguía preguntando incisiva la Montero. Y
llegaron preguntas que olían más a envidia que a admiración: “Sé que has pedido
más prime time, ha salido en prensa. ¿Qué más necesitas hacer?”
Y al final llega la gran estocada:“Anne, parece que estás enfadada, hija, te veo con tensión. Que estás hablando conmigo”. Y en ese momento Igartiburu zanja, como
para sí, la ignora y mira a los colaboradores.
Montero no consiguió que Anne se relajara para poder hacerle
una entrevista sobre sí. La tuvo en tensión en cada pregunta profesional. Hasta
en varias ocasiones dejó caer que le deseaba que le fuera bien en el programa
de tarde (no por ella, ni porque se lo merece), sino porque era importante para
el arrastre de cadena.
Y Anne, acostumbrada a lidiar con grandes orangutanes como John Cobra, se las devolvió todas a La Montero recordándole el nombre de Inés Ballester (anterior presentadora de Las Mañanas de TVE).
¿Os imagináis que vuelve Telepasión a las Navidades de la pública? Estas dos estrellas de TVE se tirarían de los pelos en cualquier intervención conjunta. Se arrastrarían por los pasillos peleándose por presentar las campanadas de fin de año. ¡Amargas fiestas con estas nuevas fieras de La 1!
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