Zapatero tiene más mano en TVE de lo que parece. No creo que la oclusión del himno nacional al inicio del Ath.Bilbao-Barcelona (con más de 10 millones de espectadores pendientes) pueda atribuírsele a un "fallo humano" como justificaron después. Más bien, los de TVE rectificaron y pusieron el himno posteriormente, obligados por la polémica que en Internet se estaba montando y que los enemigos de Intereconomía estaban destapando cambiando por completo la escaleta de su debate en directo El gato al agua.
Y digo Zapatero, el gobierno, porque aunque TVE parezca imparcial, la tele generalista está dominada por el partido socialista: Cuatro y La Sexta son clave (Nunca me tragué que la polémica Wyoming-Intereconomía no estuviese planificada a un día de conocerse los datos del paro de enero), Telecinco interesa porque es el germen del pan y circo del siglo XXI, y La 1 es una plataforma tranquila con sus Eurovisiones y debates light.
Tras el encuentro, la cadena emitió un especial 59 segundos donde se planteaba quién había ganado el debate Zapatero o Rajoy. ¿Por qué ser tan infantiles?, ¿Acaso puede titularse un encuentro de dos días con todos los partidos políticos como un cara cara entre Rajoy y Zapatero? Por supuesto, la mayoría de los invitados terminaron dándole el triunfo al Presi.
Se trata de desviar la atención: Hoy todo el mundo comenta si el himno sonó o no a tiempo y si la rectificación fue correcta. ¡Qué país! Preocupándonos por lo que se escucha en un partido de fútbol, por lo que se dice por la tele, por las bromas de un cómico a un payaso. Y mientras nos caemos al pozo, sin fondo, pero con un ordenador por cabeza. O por una cabeza de ordenador.
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NOTA: El director de TVE, Javier Pons, ofrece una rueda de prensa a las 13 horas de hoy jueves en Prado del Rey para explicar lo ocurrido anoche respecto a la no emisión en directo del himno nacional en la final de la Copa entre el Barcelona y el Athletic de Bilbao.
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