viernes, 30 de marzo de 2007

Sin sitio para el reality

Ya ha llegado el día en que podemos gritarlo: ¡El reality está acabado! Se equivocan los de Telecinco preparando con tanto ahínco el quinto Supervivientes.

Los participantes tendrán su viaje Express de la Isla al plató antes de que al chulo de turno le salga su primera almorrana.

Los datos hablan por si solos: La última edición de GH y OT: las menos vistas. Los concursantes que estuvieron andan ahora echando currículums por el Prica, ni siquiera le han servido a la cadena para rellenar un TNT.

Los realitys de rompe y rasga, estrenados a bombo y platillo la pasada temporada, finalizaron bajo el hielo del infierno. La gente está harta de ver por colchones cachondos a contraluz. Los subtítulos de palabras inaudibles tampoco funcionarán bajo el cocotero.

El fichaje de Mario Picazo ha sido un buen intento de darle un “toque marejadilla” al formato pero es poco desafiante a estas alturas. Hasta ‘El show de Cándido’, el antireality, fue nominado a los últimos premios de TP compitiendo con los antaño monstruos GH y OT.

Se lo llevó el musical de marras por los pelos. No es ninguna sorpresa. Aún queda mucha quinceañera constante que estudia el superpop mientras pasa la clase de literatura

Sin embargo, las marujas, espectadoras potenciales de aventuras en continentes a los que no viajarán nunca, están ya escarmentadas y dicen NO a la telerrealidad. Y no porque se pasen del chope al “chopenhaur”, sino porque el reality lo ha inundado todo en televisión. Sale disfrazado cada día en antena.

El polígrafo en las tardes: Presentación del famoso, traca de 20 nominaciones atado al polígrafo y 20 decisiones finales. Si el reality se resuelve en 30 minutos, ¿por qué esperar 3 meses?

Hasta la audiencia decide ahora, en directo y cara a cara con el Presidente del Gobierno, sobre sí éste debe o no abandonar Moncloa. Si el reality se ha sofisticado a estos niveles, ¿quién querrá ver a un nuevo Pipi en diferido y a miles de kilómetros de distancia buscando un sitio para sentarse?

No hay comentarios: