Odio, curiosidad, prozac y dudas

Lucia Etxebarría ha criticado en numerosas ocasiones a la telebasura. Nadie habría sospechado nunca que la escritora participaría de un programa de televisión de ese corte. Y mucho menos que ella misma reconozca que sabe que es basura sensacionalista, pero que como da mucho dinero... pues entra. Lo odia, pero entra. Todos tenemos que pagar facturas, pisos, manterner retoños... pero no todos caemos en la incoherencia.

Sin ir más lejos, Mayra Gómez Kemp ha sido tentada en muchas ocasiones para participar en distintos realities. Y la maestra del 1,2,3 siempre ha dicho NO: "Si lo único que me tiene que ofrecer la televisión son programas de este corte, paso de ir a la televisión".

¿Qué credibilidad le queda ahora a la escritora?, ¿podrán perdonárselo sus lectores?, ¿le mirará de manera distinta la profesión? La escritora de Amor, curiosidad, prozac y dudas, es consciente de donde se ha metido, de querer venderse. Y eso le tiene que pasar factura. Claro que si el mísmisimo Presidente del gobierno juega sucio y sigue cumpliendo con sus funciones, no es de extrañar que este país perdone a Lucía este escarceo amoroso con la telebasura y pronto le volvamos a ver vender novelas como si nada.

Veremos cómo se lo monta en su periplo veraniego. De momento todo apunta a que será la primera expulsada (ni siquiera se vistió como el resto de sus compañeros) y que la cosa solo trataba de buscar polémica en el arranque.