Publicitis

Por Bosco Palacios

Un 36% de los espectadores españoles considera que la TDT ha defraudado sus expectativas y no es para menos.

Lo que más disgusta de la TDT, según este estudio, es la calidad deficiente y los contenidos "basura" que ofrece la programación (27%). Los encuestados mencionan a continuación los cortes de emisión (17%) y la redifusión y reposición de programas (14%).

Y otro dato destacado es que la publicidad, que tradicionalmente ha sido uno de los aspectos más rechazados de la pequeña pantalla, constituye ahora un inconveniente solo para el 4%.

Lo cierto es que este 36% que tiene TDT en casa y que no la sigue habitualmente forma el conjunto de espectadores que bien podría disfrutar con la publicidad, con buenos anuncios que llevarse a la vista en caso de seguir habitualmente la tele.

El problema, además de en las cifras, se encuentra en que la calidad de los contenidos que ofrecen las teles ha disminuido tanto que son pocos los comerciales que pueden llegar efectivamente a los espectadores integrados.

El público de la TDT, además de usar el mando para todo (por eso también la publi ha dejado de ser un problema), es mucho más selectivo a la hora de sintonizar canales. Muchos de los cuales son eliminados del dial de cada casa o arrastrados de la línea de favoritos, lo que los hace inexistentes.

La gente se ha hecho una TDT a la carta, una nueva tele que no le ofenda a su inteligencia. Y los espectadores que aún permanecen con todo el listado de canales basura por su receptor, me temo que no son aptos ya ni para atender, ni para entender los anuncios más simples.

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