Por: Bosco Palacios
Me he enganchado a la serie Águila Roja esta temporada con el único propósito de ver los nuevos pasos profesionales de Lydia Bosch, una de nuestras Munsters favoritas, pero el esfuerzo ha sido en balde.
Se ve que Lydia, que interpretará a una monja, se ha hecho de rogar ya que su aparición no sucedió en el estreno de este lunes, como en todos los medios se había anunciado. ¿O salíó tan poco que me la perdí en algún bostezo?
Finalmente, dentro de la pena, sentí no perder el tiempo por descubrir algo: Lo curioso que resulta ver cómo una serie tan laureada puede resultar de lo más patética si no se ha seguido con anterioridad. Descubrir nuevamente que una serie muy seguida en España es sinónimo de mala.
Imagino que los aficionados a la ficción, encontrarían un capítulo de lo más interesante, con sus personajes desquitándose de sanbenitos pasados y abriéndose a nuevas tramas. Pero yo, que desconozco quiénes son y por qué están, vi una cosa que cojeaba.
Es lo que tiene hacer una serie de masas, para reenganchar y fidelizar y no para tener buen tino por sí misma. Es lo que tiene hacer series como si fueran salchichas. Y es que todo en este Aguila estaba agujereado, desde las caras de los personajes hasta los líos amorosos y de palacete que nos presenta.
Previsible e infantilizada, sin llamar la atención ni en actuaciones, ni siquiera en efectos especiales (algo por lo que muchas ficciones de paso se salvan). Habrán hecho la película con ella, pero a esta serie le falta beber del cine para hacerse menos pequeña. Que grande es otra cosa.
SIGUE LA TELE DE CRISTAL EN ELECTRODUENDE.COM
Me he enganchado a la serie Águila Roja esta temporada con el único propósito de ver los nuevos pasos profesionales de Lydia Bosch, una de nuestras Munsters favoritas, pero el esfuerzo ha sido en balde.
Se ve que Lydia, que interpretará a una monja, se ha hecho de rogar ya que su aparición no sucedió en el estreno de este lunes, como en todos los medios se había anunciado. ¿O salíó tan poco que me la perdí en algún bostezo?
Finalmente, dentro de la pena, sentí no perder el tiempo por descubrir algo: Lo curioso que resulta ver cómo una serie tan laureada puede resultar de lo más patética si no se ha seguido con anterioridad. Descubrir nuevamente que una serie muy seguida en España es sinónimo de mala.
Imagino que los aficionados a la ficción, encontrarían un capítulo de lo más interesante, con sus personajes desquitándose de sanbenitos pasados y abriéndose a nuevas tramas. Pero yo, que desconozco quiénes son y por qué están, vi una cosa que cojeaba.
Es lo que tiene hacer una serie de masas, para reenganchar y fidelizar y no para tener buen tino por sí misma. Es lo que tiene hacer series como si fueran salchichas. Y es que todo en este Aguila estaba agujereado, desde las caras de los personajes hasta los líos amorosos y de palacete que nos presenta.
Previsible e infantilizada, sin llamar la atención ni en actuaciones, ni siquiera en efectos especiales (algo por lo que muchas ficciones de paso se salvan). Habrán hecho la película con ella, pero a esta serie le falta beber del cine para hacerse menos pequeña. Que grande es otra cosa.
SIGUE LA TELE DE CRISTAL EN ELECTRODUENDE.COM
6 comentarios:
El secreto del éxito de las series es tan grande como el de la fórmula de la coca cola... Sólo así se explica (y no digo que sea mala, como dices tú, Bosco, jeje) que una serie como Águila Roja, que estuvo a punto de no ver la luz y a la que se le revisó de arriba a abajo los guiones, sea la serie más vista en España, mientras que, por poner otro ejemplo de TVE, una serie como Desaparecida (Carlos Hipólito, Luisa Martín, Miguel Ángel Solá...) con un buen guión, buena producción, y premiada por la crítica y por la unión de actores, pasara sin pena ni gloria por la parrilla...
Desaparecida, desapareció porque era buena.
Por cierto, Bosco, me das pronóstico para Cheers? A mí da un mal rollo y una grimilla... Sobretodo por ese "algo muy español", y encontrarte que ese algo tan español sea el copiar...
Villa, no acostumbro a vaticinar audiencias por gusto, pero creo que no va a maravillar. Las chicas de oro, hace justo un año, no llegaron ni a cobre. Y a Cheers le veo que si es rollo siete vidas irá bien en audiencia, pero como vayan con otro ritmo y chistes lo llevan crudo. Y si no funciona seguramente será por eso y a La Tele de Cristal me temo que le gustará. Sigo desaprendiendo como se deshacen las cosas. Bso.
Gracias por la respuesta, Bosco ;)
Además, más que la parte de las audiencias, me interesaba tu opinión a priori sobre la serie, porque de audiencias, querido amigo (si me permites la licencia, jeje), está claro que no hay forma de predecir el éxito/fracaso de las series, que ya van demasiadas sorpresas para bien y para mal, jeje
De momento te adelanto que la banda sonora es de Dani Martín, el canto del loco, de morirse.
Publicar un comentario