"Todas las puntas son de oro, no te engañes", le recordó Antonio Gala a Jordi González cuando este le intentaba convencer de que la Médium de su programa había acertado al hablarle de una pluma.
No era muy dificil ver la pluma en Antonio, poeta amanerado, como tampoco lo fue aguantar hasta el final el show a lo Ghost que Telecinco nos dio más allá de la medianoche.
Es un programa que funciona: Da a los que creemos en el más allá el regalito de deleitar nuestra imaginación con posibles espíritus, visibles para una señora que podría pasar por hermana de Bienvenida Pérez si no llenara de paz el plató cuando lo pisa.
Por otro lado, los más excépticos podrán engancharse a 'Más allá de la vida' para sacarle punta al espacio. Se me ocurren algunas dudas razonables: ¿Por qué si, como dice la Médium, hay guerra de espíritus para comunicarse con ella, su actitud sigue siendo impasible?, ¿ por qué los espíritus controlan el tiempo televisivo y todos se despiden a los cinco minutos?, ¿por qué los invitados no hacen preguntas a las presencias o viceversa?
Hace años, Bibi Andersen en la misma Telecinco dejó K.O a público y audiencia con otro programa de mentes prodigiosas: 'Hip, hip, hipnosis', se llamaba. Al principio pegó fuerte, pero terminó por convertirse en un circo y salió de la parrilla. Veremos si con los espirítus también hay vida más allá del estreno.
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SIGUE LA TELE DE CRISTAL: A DOS FOCOS BAJO TIERRA
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