martes, 22 de abril de 2014

Supervientes 2014: Se busca la bicha

En Supervivientes 2014 sigue faltando el malo de la película. La víbora Nizar de la edición pasada no la han conseguido gestar ni con "la concursanta" más divertida hasta la fecha de G.H, Carolina Sobe, que está como sobada entre los árboles, ni con la precandidata frikie a Eurovisión, Rebeca, quien ya pisara la isla cuando esta se emitía en otro canal y cuyo único escándalo duro de pelar fue tirarse mal del helicóptero.

Tampoco se ha convertido el añejo de Mohedano en el malo de la historia televisada, al menos no de cara al público ni al presentador, tan solo para sus compañeros, quienes lo nominaron junto a Nacho Montes en una noche de gala de las más soporíferas.  Bien podría haberse echado ayer un sueñecito Francisca, la madre de Rebeca. ¡Sueñazo de gala!

Y es que tan solo ver a Bibiana Fernández en plató levantó el ánimo de una edición que se ha consagrado como de las más aburridas: con concursantes que nadie conoce, tan solo son famosos sus defensores, y con menos riesgo y emoción que ninguna. ¿Por qué nos están aburriendo tanto este año?, ¿dónde está la bicha que lo levante?, ¿entrarán más?

Quizá pensaron que el formato era de por sí síntoma de éxito, pero se equivocaron: Ni Raquel Sánchez Silva, ni Jorge Javier Vázquez, ni siquiera las nominaciones y expulsiones a ras de fuego son sufiencientes para levantar este aburrido casting que le trae e Mediaset por la selva de la amargura a la hora de planterarse otra futura edición. ¿Renovará?

En plató destacó una vez más Pelopony, quien promete escándalo con antiguos participantes recién llegados en los debates creados para la ocasión. La Peloponi, como la mayoría de ellos, valen más fuera de la isla que dentro. Y es que a todos los aventureros de esta edición les gusta más vivir del cuento fácil a golpe de canapé en plató que de pasar hambre en un trozo-tierra por un futuro premio depredado por hacienda. ¡Selvático!

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