Los abuelos cantarines no han cosechado los datos de audiencia esperados, pero Generación Rock ha sido un programa digno y de calidad que no ha caído en el tópico ni ha tratado a los de la tercera edad como minusválidos
Un espacio sensible, no sensiblero, y tierno.
No concebido para reírse de ellos sino con ellos. El trato que se les da a
estos mayores es delicado y con mucho respeto, a diferencia de lo que quería
hacer Mercedes Milá con su Gran Hermano de ancianos. Aquí se los valora porque
lo valen y saben hacer, por su talento.
Y además han contado con el bueno de Melendi: El nieto travieso de todos ellos. Humano,
cariñoso y lleno de vida, emocionándose con cada nota, con cada palabra, con
cada recuerdo de cada pupilo. Le doblan la edad, pero están en sintonía en un
programa sin competitividad y con buen rollo.
Un programa que ha tocado la nota sensible, con delicadeza y bien hecho. Una pena que no haya segunda edición para deleitarnos con sus voces y sus historias. Tierno.
1 comentario:
Pues a mi me ha encantado. Los abuelillos majisimos y Melendi, Jopi y Reichel han estado de arte. Han sido respetuosos y cariñosos con ellos, sin caer en el lagrimeo ni el morbo que tanto guata en ciertas cadenas. Melendi es igual de guapo por dentro que por fuera
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