El mando a la mierda (II)

.... VIENE DE EL MANDO A LA MIERDA (I)

En los debates sobre este nuevo Consejo Audiovisual se insiste sobre la protección infantil, sobre nuestros niños, sobre el horario, sobre la violencia, sobre las escenas de sexo, sobre los tacos...

Dejemos en paz a los niños, que harto tienen con aburrirse con esos dibujos animados cargados de violencia y esos videojuegos de atolondramiento. Centrémonos de una vez en los adultos, que necesitamos estar protegidos de la telebasura y de la que nadie nos salva, ni siquiera el mando, que nos esclaviza, aunque no queramos.

Porque los contenidos dañinos y embrutecedores han embullido la televisión y nos afecta a todos. En las relaciones personales, en las profesoniales y en las politícas. La democracia ha caído a lo más bajo como consecuencia de la televisión que tenemos:

Ahora la moda es la crispación y según lo que se lleve en la pantalla reaccionarán con nosotros mañana en la calle. Y ojo también a la hora del voto ya que contará lo mismo el suyo que el de la señora que añoche vio cómo Carmen de Mairena se comía una polla mientras se tiraba un pedo. Y cuidadito porque esas señoras, que tanto "mandan" con el aparatito a distancia, se cuentan por miles de millones.

La cosificación de la persona adulta necesita ser censurada cuanto antes, hay que ponerle veto a la infantilización permanente de la sociedad, y si este Consejo meterá mano en los contenidos televisivos que tanto ayudan a ello, al mal de todos, bienvenido sea. Que manden de una vez el mando a la mierda.

Y cuando, manteniéndose unos valores minínimos de dignidad y respeto, llegue una televisión de la que no nos sintamos avergonzados, o cuando los contenidos varíen realmente, entonces escogeremos y el mando podrá servir por fin, como dicen, para ejercer la libertad.

La libertad individual, con la dictadira del share, no existe. No se engañen cuando cambien de canal porque en realidad están viendo lo mismo. No hay libertad de elección. El mando le cuenta a usted sencillamente porque usted no cuenta. Ni cuenta, ni pinta nada.

-------

LEE EL MANDO A LA MIERDA (I) EN LA TELE DE CRISTAL.