De verden cuando...

Género: Humor; Contemporánea; Fechas: desde 20 de diciembre de 2012 hasta 3 de febrero de 2013. Teatro: Teatro La Latina Madrid / Madrid J a S a las 20.30 h. D a las 19 h; Precios: De 15 a 26 euros.Anticipada: taquilla de M a D de 11 a 13 h. y de 18 a 20 h., Red Ticketmaster (www.ticketmaster.es, 902 15 00 25 y tiendas asociadas), CX Telentrada Catalunya Caixa (www.telentrada.com, 902 10 12 12 y oficinas) y www.teatrolalatina.es; Autor: Millán Salcedo Intérpretes: Millán Salcedo y Marcos Cruz

Tras su anterior espectáculo "Yo me subí a un piano verde", Millán Salcedo regresa a las tablas con “De verden cuando”. En la obra, de ritmo trepidante, Salcedo se entrega a su público en un doble sentido: se entrega porque lo da todo y se entrega en el sentido de rendirse, de claudicar comercialmente. Por eso el cómico no abandona los tics, las onomatopeyas o los juegos de palabra que lo hicieron famoso en su etapa de Martes y Trece.  ¡Afortunadamente mantiene ese personaje tan especial!

Acompañado una vez más por el pianista Marcos Cruz y sin Paco Mir en la dirección, Salcedo juega con muy pocos elementos: un piano, pocos cambios de vestuario y un proyector. El resto es él y solo él ante el público, noventa austeros minutos en estos tiempos en los que muchos cómicos además de tener que montar una producción propia, van a porcentaje de taquilla con el empresario teatral. Y si entra gente se gana dinero y si no se pierde.  Y el creador de la fabulosa ‘Ketty no para’, no está para reñir con la audiencia teatral.

Por eso Millán Salcedo divierte, pero no arriesga. No sólo tira de empanadillas y maricones de España, sino que además al final del show proyecta, mientras espera sentado, imágenes de sus años dorados en la tele. Y en cuanto a su humor, unas veces es certero pero otras algo grueso y más cercano a artistas como Moncho Borrajo, Manolo Royo o Pedro Ruiz. 

“De verde en cuando” es un disparate, una mezcla descerebrada y loca, una ensalada cortada y aliñada de forma un poco caprichosa, pero que se saborea a gusto. Y es que con Millán Salcedo te ríes sí o sí porque es un tío muy cómico. Como él mismo ha dicho, su madre no tuvo un niño, lo que tuvo es un gag.