Música, ritmo y memoria. Estos son algunos de los ingredientes con los que juega cada noche Javier Estrada en Al pie de la letra (Antena 3. De L a V, a las 21.45 h). El seductor presentador nos habla de su carrera como músico y actor, de su paso por la casa de Gran Hermano y de sus otras pasiones: el tenis y las mujeres.
¿Qué canción no podría seguir al pie de la letra?
Muchísimas. Con este programa me he dado cuenta de la cantidad de canciones que no me sé.
¿Desde cuándo le viene la afición por la música?
Me compré mi primera guitarra a los trece años y eso ya quería decir que me gustaba mucho la música.
¿Cómo es Al pie de la letra?
Es un programa que hace hogar, es muy familiar. Sobre todo, con la familia desde cero a 99 años.
¿Aunque las bailarinas vayan con poca ropa?
(Ríe).- Sí, pero te prometo que eso les encanta tanto a los abuelos como a los nietos.
¿Lo pasa mal cuando los concursantes desafinan?
No. Lo pasamos muy bien y todos vamos a lo mismo, que es reírnos de nosotros mismos y pasárnoslo pipa.
¿Le molesta que le sigan preguntando por Gran Hermano?
Es una etiqueta que me puse aquella vez. La llevo conmigo y con orgullo. Gracias a aquello se me abrió la primera puerta, pero sólo estuve diez días en la casa y no hay mucho más que contar.
¿Guarda relación con sus compañeros de la tercera edición?
Gracias al messenger mantengo relación con muchos de ellos. Con Carolina o con Óscar, por ejemplo.
¿Utiliza la música para su vida?
Para todo. Mi vida tiene banda sonora.
Una canción para enamorarse...
Cualquiera de Julio Iglesias.
Una para ser rebelde...
Cualquiera de Queen.
¿Para qué momento serviría su música?
Mi música es muy romántica. Escribo sobre los sentimientos, aunque aquí en España no se me reconoce todavía como cantante.
Y su programa está a punto de desbancar a Escenas de matrimonio...
Nunca he tratado de desbancar a nadie. Creo que Escenas... es un buen formato que gusta al público y, por nuestra parte, estamos contentos de entretener de una forma familiar. En la televisión hay espacio para todos y no tengo el deseo de que a los demás les vaya mal.
Pero ya están superando (19 %) la media de la cadena...
Eso es muy importante y me enorgullece. Somos uno de los muchos que va tirando de ese carro tan grande.
¿Volvería a entrar a un reality?
Cada momento de la vida hay que disfrutarlo y vivirlo, y no te diré que nunca lo vaya a hacer, pero sería una estupidez meterme en un reality ahora y dejar un programa que está funcionando.
¿Es aventurero?
Soy muy aventurero. Adoro la aventura, el riesgo y los retos.
¿Cuál fue la última locura que ha hecho?
Ser un tenista que monta una caravana y que se va de gira tres años jugando al tenis. El tenis fue siempre mi pasión.
¿Qué sería de Javier Estrada si no hubiera tenido esa lesión?
Habría seguido probando suerte con el tenis y ahora sería entrenador.
¿Cuál es ahora su pasión?
Al pie de la letra.
Y de mujeres...
(Suspira) ¡Ay, Dios mio!... las mujeres.
Le vuelven loco...
Me vuelven loquísimo. (Ríe).
¿Se ve formando una familia?
Sería la ilusión de mi vida.
¿Cuántos hijos le gustaría tener?
Todos los que me diera el sueldo para mantenerla.
Pues han de ser muchos, porque en televisión se gana muy bien...
La televisión te trata a tiempo parcial, nada más.
¿Cuándo vuelve a Chile, donde es una mega estrella?
Las megas estrellas están en el cielo. Tengo la suerte de que en Chile me esperan mis dos mil mujeres enganchadas a la Web. Desde aquí saludo a la webmaster que tanto me cuida.
¿Ha tenido alguna vez algún problema con las fans?
Ojalá tuviera problemas con las fans. Hacen mucho ruido, pero se lanzan muy poco. Desde aquí les digo que Javier Estrada es de carne y hueso.
PUBLICADA EN PAPEL Y WEB
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