Ivonne sin límites

Un personaje todoterreno: Ivonne Reyes. La que fuera una de las presentadoras más chisposas y buenorras de España, hibernó durante años para terminar protagonizando la peor telebasura de los últimos tiempos. Tras sus truculentas intervenciones contra el padre de su hijo, Pepe Navarro, Ivonne intentó volver a hacer televisión y el canal de Pedro J. Ramírez le dio esa oportunidad.

Una oportunidad no merecida: no creo que a los personajes se les pueda ignorar y perdonar un sórdido curriculum. Si has vendido por televisión tu vida, o has participado de algún programa que mercadee con ello, no puedes volver al medio como cara de un concurso familiar o de un programa blanco. Es como si a Mercedes Milá o a Jorge Javier Vázquez les dan algún día algún informativo: No cuela, enterraron su credibilidad con miles de millones.

Metiéndonos en las labores propias del concurso, Tensión sin límites (el clásico Alta Tensión) tuvo en Reyes la peor conducción de su historia. El espacio, que fue presentado anteriormente por los grandes Constantino Romero (Antena 3) y Luis Larrodera (Cuatro), dejó de brillar de la mano de la venezolana. La "madre exclusivera" hacía enfarragoso lo sencillo y ponía a los concursantes la cabeza como un bombo. 

En el panel final, por ejemplo, donde hay que tener la máxima concentración, Ivonne azuzaba sin ton ni son a los concursantes para que corrieran por el plató y marcaran y desmercaran panel. Un presentador no sólo tiene que saber hablar (algo que ya le costaba hacer bien), sino también saber estar callado (ni se lo planteó la chica).

Finalmente ha sido la audiencia la decisora del final del concurso, que tras un fugaz cambio de horario, ha sido cancelado de la parrillla. ¿Volverá Ivonne a hacer la tele que mejor se le da o probará suerte con otro concurso?